La infancia es una gran etapa de la vida.
No apuremos a los chicos, tienen toda la vida para ser grandes, dejemos que aprendan jugando, que usen más trajes de superhéroes… y menos disfraces de adultos, que se manchen con helado, que se mojen con la lluvia, que se ensucien con la tierra, que se caigan y aprendan a levantarse.
Desenchufémoslos de las pantallas y salgamos juntos a mirar el cielo.
Regalémosles menos cosas y más tiempo, contagiémonos de su risa.
Las cosas más divertidas no siempre se compran y el mejor envoltorio es un abrazo, enseñémosles a escuchar y a mirar a los ojos… a compartir en vez de competir, a que la diversidad no separa, enriquece.
Digamos la verdad.
Seamos ejemplo, pero aprendamos juntos, alimentemos su imaginación inspirémoslos a ser ellos mismos…
Autor Desconocido